Jean Francois Gravelet, conocido como Charles Blondin, nació en Francia en 1824. Desde muy pequeño se destacó como equilibrista en las cuerdas de los circos y el 30 de junio de 1859 teniendo 31 años fue el primer hombre en cruzar las Cataratas del Niágara a través de una cuerda. El fue conocido desde su temprana edad como “El pequeño maravilla”. Esto me hace recordar a alguien que a los 12 años “todos los que le oían, se maravillaban de su inteligencia y de sus respuestas. (Lucas 2:47). Ya siendo de 30 años se decía de él: ¡Jamás hombre alguno ha hablado como este hombre! (Juan 7:46). También: ¿Quién es éste, que aun los vientos y a las aguas (mar) manda, y le obedecen? (Lucas 8:25). No hay duda que estamos hablando de ese gran hombre llamado: “Jesucristo”. Hace dos siglos el equilibrista francés Blondin sorprendió al mundo al cruzar, sobre una cuerda 18 veces las cataratas del Niágara. La atravesó caminando, sobre una bicicleta, con una carretilla, con los ojos vendados y aun en la oscuridad. Se narra la ocasión cuando el famoso equilibrista que con éxito empujó una carretilla sobre las cataratas del Niágara. Se acercó a un muchacho y le preguntó: “¿Crees que te podría pasar en esta carretilla al otro lado de las cataratas, yendo sobre ese cable?” “Si”, respondió el muchacho. “Muy bien, súbete y te llevaré.” Pero el muchacho se negó, probando así que realmente no creía...